lunes, 21 de mayo de 2007

El Manifiesto Campurriano: Campurria entre rejas

Sobre un escarpado pico de la por entonces cordillera cantábrica (hoy en día cordillera precampurriana) un pastor canta con voz desafinada al atardecer. Su llanto (en fa sostenido) es triste y melancólico y el astro rey, deja paso imperturbable a la luna en el milenario ritual.
-¡Cava Toñín, cava!-apremió Breico.
-¡No puedo cavar más deprisa Gran Colegui!-respondió Toñín jadeando.
-Esta es la cuarta escudilla que rompe ya, como siga así vamos a acabar comiendo en el suelo.-apuntó Tomás con tono neutro e indiferente recostado contra la pared.
-No nos rendiremos ahora coleguis, cuando hemos estado tan cerca, en la misma meta.-Breico hablaba erguido en su metro metro setenta y tres, los puños cerrados apuntando su rostro sereno hacia los barrotes de la ventana que dejaba entrar los rayos de la luna menguante.- Pasaremos a la clandestinidad, tejeremos una red de células autosuficientes y organizadas, una sociedad campurriana paralela a la ficticia realidad que venden nuestros opresores, la infraestructura suficiente para que el día que seamos fuertes y volvamos a dar el golpe de mano, reivindicando el puesto que Campurria merece en Europa y en el Mundo ningún tipo de fuerza opresora pueda encadenarnos.
-Ahí es nada-exclamó Cuentin, recuperado de su hombro.
-Aunque claro, antes tenemos que salir de aquí.
-Saldremos Tomás, saldremos.




Madrid, pocos días después, Sede del periódico La Nación
-¡Qué que me dices!, no me lo puedo creer-la voz de la directora era estridente.-¡Es insultante, vergonzoso!-acto seguido colgó, dio media vuelta y con toda la potencia de sus pequeños pulmones gritó-¡Detengan la producción! ¡Tenemos nueva portada!

Madrid, el mismo día, Gran Vía
-¡Extra, extra! ¡Adalides de la libertad perseguidos y encarcelados! ¡Extra, extra!
-¡Trae pa acá eso mocoso! “… la voluntad de un pueblo segada por el yugo opresor de los tiranos […] prisioneros políticos […] maltrato policial […] la cúpula del Partido Independentista Campurriano encarcelada, sus miembros perseguidos como perros, ¿podemos mirarnos al espejo con este atentado contra libertad? ¿podemos llamarnos demócratas? ¡No! señores, señoras y señoros, ¡no podemos! No hasta que esta mancha se borre. ¡Libertad para los presos políticos! ¡Libertad para el PIC!

Puerta del Sol
El reportero estaba rodeado de una ingente muchedumbre y tenía que gritar para hacerse oír, a su espalda millones de gargantas coreaban “¡A la bin, a la ban a la bimbombam, PIC PIC LI-BER-TAD!”.
-Las manifestaciones espontáneas se multiplican por toda la península, las autoridades gubernamentales han contando ya un total de más de 90 millones de manifestantes solo en las principales ciudades. ¿Podrá el gobierno hacer frente a esta situación? ¿Escuchará el presidente al pueblo?, Aitor Menta noticias canal 5 y ½.



Santoña, Penitenciaria del Dueso
¡La mano!-Toñín estaba dichoso-Me entra la mano Breico.
Los cuatro observaban el pequeño hueco entorno al cavador, estaban dichosos, la libertad estaba ahora más cerca. Tal era su alegría que no escucharon los pasos del guardia acercarse, la puerta se abrió y el funcionario quedó perplejo frente a la imagen que se dibuja ante sus ojos.
-Adiós-dijo Tomás. Toda su esperanza barrenada en una fracción, su pena se recrudecería, el túnel, su vía de escape, sería sellada y con ella sus posibilidades de refundar el PIC, de liberar Campurria, de reivindicar la deuda histórica que la península, Europa y el mundo entero les debía, ¿Qué sería ahora de los campurrianos? ¿Qué sería de ellos? La segunda pregunta tenía solución, “en breves instantes, este armario empotrado va a enfadarse mucho, mucho, se va a poner hecho un basilisco y déjate a ver si no me como algún porrazo de propina, luego nos van a llevar a una celda de acero inoxidable por lo menos, sin escudillas para cavar y con raciones de comida a comer en el suelo, como los perros y luego cadena perpetua o más.”
-Breico-dijo en un susurro mientras el guardia permanecía perplejo mirándoles-nos van a condenar a cadena perpetua.
-Tranquilos coleguis-dijo el líder-Dentro de tres años seguiremos siendo jóvenes.
El guardia abrió la boca:
-Levantaos, sois libres.

No hay comentarios: